12 de abril de 2017

Buitrón (Cisticola Juncidis)

Pi-pi-pi-pi... Si alguna vez hemos escuchado este sonido por el campo, fácilmente podremos averiguar cuál es el ave que nos acompaña en el día de hoy. Su canto y el vuelo ondulado son las principales características que lo definen. Aunque su pequeño tamaño lo puede hacer prácticamente invisible, ya que únicamente se le escucha cantar pero en ocasiones es difícil verlo y no se sabe si se encuentra en vuelo o posado en algún arbusto. Hoy hablamos del Buitrón.
Se trata de un ave paseriforme que pertenece a la familia de los cisticólidos (Cisticolidae). Está ámpliamente distribuido por África, Asia y Australia, mientras en Europa se encuentra en los países rodeados por el Mediterráneo. En nuestro país lo vemos por las zonas bajas y cálidas. Presente desde el nivel del mar hasta los 950 metros de altitud, aunque por encima de los 600-800 metros ya es raro encontrarlo.


El Buitrón es una de las aves más pequeñas de Europa. Alcanza los 10 centímetros de longitud y una envergadura entre los 12-15 centímetros. Su peso ronda los 8-12 gramos. Tiene un perfil redondeado. La parte de arriba de su cabeza (píleo) y su dorso es de color pardo oscuro y fuertemente marcados con tonalidades oscuras. Las partes inferiores son claras, con los laterales y pecho de color ocre. En la cara opuesta de su cola posee una serie de bandas negras y blancas que son visibles en vuelo. Tanto sus patas como su pico son cortos. Los jóvenes son parecidos a los adultos pero con tonalidades algo más oscuras y rojizas.
Empezábamos esta entrada con su canto, el cual repite insistentemente, cosa que le permite destacar sobre las demás aves.
Principalmente se alimenta de insectos los cuales persigue con gran habilidad. En invierno puede añadir a su dieta algunos frutos y semillas.



Su hábitat son los campos abiertos, donde haya abundante vegetación, zona húmedas y terrestres, carrizales, cultivos de regadío y cultivos de cereal.
En las zonas en las que vive, el macho construye un nido de exposición a nivel del suelo para impresionar a la hembra y la atrae con su canto. La época de apareamiento comprende los meses de marzo hasta agosto. Realizan dos o tres puestas anuales. El macho puede aparearse con varias hembras a la vez.
La hembra es quien construye el nido real a baja altura entre la hierba. En él deposita de 4 a 7 huevos de color blanco o azulado y moteados. La incubación dura unos 13 días y corre a cargo de la hembra. También cuidará y alimentará a los pollos. Estos podrán volar pasados los 15 días y serán independientes a los 20  días. Con unos pocos meses de vida ya serán capaces de reproducirse.

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