Hoy tenemos una nueva entrega de las aves exóticas que podemos encontrar en el Parc Samà (Cambrils, Tarragona). Hace unos meses tuve la oportunidad de volver y pude comprobar que había algunas especies nuevas. Hoy es el turno de esta clase de paloma que habita en el sur y este de África, concretamente en la zona subsahariana. Se trata de la paloma de Guinea o también llamada Guinea manchada debido a su aspecto que detallaré más adelante. Su hábitat es bastante amplio entre los que se incluyen las zonas abiertas con vegetación, montañas, arbustos, campos agrícolas, las ciudades y sus suburbios. Su comportamiento suele ser tranquilo y se la puede ver en solitario, en pareja o en pequeños bandos, aunque, en algunas zonas se la ha visto en grupos muy numerosos. El nivel de amenaza para esta especie es de preocupación menor por lo que no se encontraría en peligro. Pertenece al orden de los Columbiformes y a la familia de las Colúmbidas (Columbidae) en las que se incluyen todas las palomas, tórtolas y otras aves de perfil similar.
Como podemos observar su plumaje es de color gris azulado por la parte de la cabeza, cuello hasta bajar por el pecho y vientre. En ambos laterales del cuello, el manto y parte de sus alas tenemos esa coloración marrón canela. Las plumas en el cuello y arriba del pecho poseen una tonalidad metálica y verde pálido. En las alas también tiene esas manchas de color blanco y diferentes tonalidades de gris.
Alrededor del ojo se encuentra la piel desnuda (sin plumas) de color rojo. Esto es lo que sería su marca distintiva.
El iris es de color amarillento y la pupila negra. Su pico también es negro y las patas rojizas. No existe dimorfismo sexual entre los machos y hembras.
Esta ave mide unos 33 centímetros de longitud y puede llegar a pesar entre los 315 y 390 gramos.
Según su forma y tamaño es muy parecido al de una paloma común (Paloma bravía) pero con colores de plumaje muy diferentes.
Su alimentación está basada principalmente en semillas y granos que obtiene de la tierra. Incluyen unas semillas con pinchos llamadas “duiweltjie doring” (Tribulus). En ocasiones también se pueden alimentar de algunas frutas maduras, vegetales o algunos invertebrados.
Ellas se reproducen durante todo el año. Su nido consiste en una plataforma fabricada con ramas y raíces que construyen en los huecos de los árboles y casas, riscos o en las palmas. La hembra se encarga de poner dos huevos de color blanco brillante. Estos serán incubados por ambos padres durante 14-16 días. Las crías abandonarán el nido cuando hayan pasado los 25 días.
Ellas se reproducen durante todo el año. Su nido consiste en una plataforma fabricada con ramas y raíces que construyen en los huecos de los árboles y casas, riscos o en las palmas. La hembra se encarga de poner dos huevos de color blanco brillante. Estos serán incubados por ambos padres durante 14-16 días. Las crías abandonarán el nido cuando hayan pasado los 25 días.
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