Comenzamos este 2018 con el pájaro, a mi entender, de los más bonitos que se pueden observar en nuestro país. También es el que más me ha costado de fotografiar, ya que llevo bastante tiempo visitando lugares e intentando "capturarlo". Hoy está con nosotros el Martín Pescador.
Esta ave pertenece al orden de los coraciformes, caracterizados por su colorido, y forma parte de la familia de los alcedínidos (Alcedinidae).
Se extiende por toda Europa, execpto por los países nórdicos; el norte de África, Asia, Japón e Indonesia. Vive en zonas de vegetación más o menos densa en las que haya siempre agua, no una cualquiera, el agua tiene que ser de calidad. Se le puede encontrar en los tramos medios de los ríos, lagunas, embalses, torrentes e incluso en canales, charcas o acequias.
Además, es muy rápido, al observar el canal de agua podremos ver una flecha azul pasando velozmente. También es un ave totalmente insociable y solitario. No permite la presencia de ningún semejante en su territorio.
Esta ave es imposible de confundir dado a sus colores vistosos, todo un deleite para nuestra vista. Posee una cabeza grande con un cuerpo rechoncho, una cola muy corta, patas cortas de color rojizo, ojos negros y un pico largo también negro. En su parte superior dominan los colores azul y verdoso o turquesa, brillantes y metálicos. La parte inferior es abarcada por el color anaranjado. Su garganta es de color blanco y en los laterales del cuello posee una mancha anaranjada que se extiende hasta el ojo. Entre los machos y las hembras las diferencias no son muy evidentes, únicamente hay que fijarse en la parte inferior de su pico, la cual en el macho es negra y en la hembra de tono anaranjado.
Este gran pescador posee una longitud de 16 a 17 centímetros y una envergadura de 25 a 28 centímetros. Su peso se encuentra entre los 30 - 44 gramos.
Su alimentación está compuesta principalmente de pequeños peces, hasta 7 centímetros, pero también varios tipos de invertebrados acuáticos como son los renacuajos, pequeños crustáceos, moluscos e incluso ranas pequeñas.
El rey pescador, de ahí su nombre en inglés Kingfisher, nos ofrece un gran espectáculo digno de ver a la hora de pescar a sus presas.
Él se coloca sobre un posadero desde el cual acecha a su presa. Una vez vista se lanza en picado, se sumerge en el agua, la atrapa con el pico y vuelve a su posadero. Ahí con un corte con el pico o unos golpes en su posadero mata a su presa y la engulle.
En cuanto a la reproducción, ellos realizan dos puestas anuales, una en abril y otra en junio. La pareja se encarga de seleccionar el lugar para anidar, normalmente un talud arenoso y principalmente el macho se encarga de excavar un túnel que acabará en una cámara donde depositarán los huevos. Este túnel puede medir una media de 50 - 90 centímetros de longitud y la cámara entre 16 centímetros de ancho y 12 centímetros de alto.
La hembra realiza la puesta de 4 a 8 huevos blancos, los cuales ambos se encargarán de incubar.
A los 21 días nacen los pollos y son alimentados por ambos entre 23 - 27 días. Pasados estos días las crías ya están preparadas para salir del túnel, aunque pasarán algunos días más en algún lugar cercano al nido hasta que decidan echar el vuelo.
Además, es muy rápido, al observar el canal de agua podremos ver una flecha azul pasando velozmente. También es un ave totalmente insociable y solitario. No permite la presencia de ningún semejante en su territorio.
Esta ave es imposible de confundir dado a sus colores vistosos, todo un deleite para nuestra vista. Posee una cabeza grande con un cuerpo rechoncho, una cola muy corta, patas cortas de color rojizo, ojos negros y un pico largo también negro. En su parte superior dominan los colores azul y verdoso o turquesa, brillantes y metálicos. La parte inferior es abarcada por el color anaranjado. Su garganta es de color blanco y en los laterales del cuello posee una mancha anaranjada que se extiende hasta el ojo. Entre los machos y las hembras las diferencias no son muy evidentes, únicamente hay que fijarse en la parte inferior de su pico, la cual en el macho es negra y en la hembra de tono anaranjado.
Este gran pescador posee una longitud de 16 a 17 centímetros y una envergadura de 25 a 28 centímetros. Su peso se encuentra entre los 30 - 44 gramos.
Su alimentación está compuesta principalmente de pequeños peces, hasta 7 centímetros, pero también varios tipos de invertebrados acuáticos como son los renacuajos, pequeños crustáceos, moluscos e incluso ranas pequeñas.
El rey pescador, de ahí su nombre en inglés Kingfisher, nos ofrece un gran espectáculo digno de ver a la hora de pescar a sus presas.
Él se coloca sobre un posadero desde el cual acecha a su presa. Una vez vista se lanza en picado, se sumerge en el agua, la atrapa con el pico y vuelve a su posadero. Ahí con un corte con el pico o unos golpes en su posadero mata a su presa y la engulle.
En cuanto a la reproducción, ellos realizan dos puestas anuales, una en abril y otra en junio. La pareja se encarga de seleccionar el lugar para anidar, normalmente un talud arenoso y principalmente el macho se encarga de excavar un túnel que acabará en una cámara donde depositarán los huevos. Este túnel puede medir una media de 50 - 90 centímetros de longitud y la cámara entre 16 centímetros de ancho y 12 centímetros de alto.
La hembra realiza la puesta de 4 a 8 huevos blancos, los cuales ambos se encargarán de incubar.
A los 21 días nacen los pollos y son alimentados por ambos entre 23 - 27 días. Pasados estos días las crías ya están preparadas para salir del túnel, aunque pasarán algunos días más en algún lugar cercano al nido hasta que decidan echar el vuelo.
